Resumen de ¿Por qué los planetas interiores son rocosos y los exteriores gaseosos?

En 1543, Nicolas Copérnico rechaza el sistema geocéntrico de Tolomeo (la Tierra era el centro del Universo). Copérnico establece que el sol es el centro y los planetas giran alrededor de él. Después un matemático llamado Galileo Galilei lo comprobó con su telescopio y le dio la razón. Esta teoría de Copérnico se le llama teoría heliocéntrica.

Se cree que hace 4.500 millones de años se formaron los planetas y el sol.

El sistema solar es un sistema planetario que se encuentra en la Vía Láctea y esta formado por una única estrella llamada Sol, por 8 planetas que orbitan alrededor de él: Mercurio, Venus, La Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno; más los planetas enanos (Plutón, Ceres, Eris, Makemake y Haumea) y por cuerpo celestes.

En el sistema solar hay un cinturón de asteroides que separa a los planetas.

Los planetas que están dentro del cinturón se les llama:
- Planetas interiores (también llamado terrestres): Mercurio, Venus, La Tierra y Marte son los más cercanos al sol, son rocosos, relativamente pequeños, tienen una alta densidad y pocos satélites. Su superficie se compone de gran diversidad de rocas.

Los que están fuera se les llama:
- Planetas exteriores (también llamados jovianos): Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno son los más lejanos al sol, son gaseosos, ligeros, grandes y tienen muchos satélites. Contienen gases  como helio, hidrógeno y metano, también se encuentra hielo. Giran deprisa y tiene más  abultamiento ecuatorial y anillos.

Cuando se formaron los planetas, los materiales ligeros se alejaron del sol mientras que los pesados se quedaron  más cerca de él. Esto hace que los planetas cercanos al sol se quedaran con sus núcleos desnudos y los gases se evaporan por su proximidad al sol.

Esto nos lleva a concluir que los planetas interiores sean más rocosos mientras que los exteriores son gigantes y gaseosos. Los planetas exteriores, por su posición en el sistema solar, tienen atmósferas densas mientras que los interiores o rocosos tienen atmósferas ligeras.